Alejandro Cosentino (fundador y CEO de Afluenta) nos explica en primera persona la experiencia de encabezar la mayor plataforma de préstamos P2P de Argentina y nos da algunas pistas acerca de sus planes de expasión para América Latina.

1. ¿Qué hace Afluenta? ¿cuanto lleva en funcionamiento?

Afluenta es la primera red social de préstamos entre personas de Latinoamérica que conecta personas que solicitan préstamos con inversores que pueden financiarlos, sin bancos intermediarios, de manera simple, segura y transparente. Desde la empresa

La tecnología de Afluenta divide cada préstamo en micro préstamos para que sean financiados por muchas personas bajo la modalidad de subasta online que son adjudicadas al mejor postor. Así́, los solicitantes no dependen de un solo inversor, mejoran las condiciones de su crédito final y los inversores evalúan en quienes invertir diversificando su dinero en múltiples solicitantes en un sistema conveniente para todos.

Para quien busca un crédito el proceso comienza con una evaluación crediticia. El sistema sólo admite solicitudes de personas solventes que luego se presentan a los inversores. La plataforma de Afluenta facilita la interacción entre las personas permitiendo que varios inversores inviertan en un solicitante y un mismo inversor pueda invertir en muchas personas.

Fue lanzado en 2012 y es la primera plataforma de finanzas colaborativas que supera los 1,000 préstamos financiados entre personas. En esto más de 2 años he visto como la colaboración es posible compartiendo lo que unos tienen que a otros les falta.

2. ¿Cuál fue la inspiración para iniciar el proyecto?

En Septiembre de 2008 una amiga pensó que el libro “El Alma de Dinero” de Lynn Twist podía ayudarme a renovar mi vocación emprendedora. No eran tiempos fáciles, la crisis financiera sacudía al mundo. El libro relata la experiencia de una recaudadora profesional de fondos que reorientó su vida ayudando a que organizaciones sin fines de lucro obtuvieran el dinero necesario para implementar obras que de otro modo serían imposibles. En esa tarea, Twist, estuvo en contacto con personas muy pobres y familias muy ricas de todo el mundo y acuñó un concepto polémico: “el dinero tiene el alma de aquel que lo posee”.

¿El dinero tiene alma? Capitalismo y Comunismo se disputan desde hace décadas su mejor uso. Muchos matan y mueren por el y esta mujer decía que tiene alma. Me pareció irracional pero el dinero es al fin y al cabo la más humana de las invenciones. Quizá no estaba errada. Me di cuenta que el dinero es como el agua. Si fluye mantiene sus propiedades: hidrata, transporta minerales esenciales y genera vida; pero si se acumula solo por el hecho de acumular, pierde el oxigeno, los minerales se desvanecen y no genera vida. Simplemente se malogra. Así entendido, los poseedores avaros de dinero serían como recipientes de agua estancada mientras que aquellos que lo usan bien representarían el agua más enriquecedora.

Una nueva visión era posible donde el fluir del dinero facilite prosperidad para todos. El dinero podía volver a fluir entre las personas como en la antigüedad, sin intermediarios, con colaboración. La gente podía generar para todos y la tecnología podía ayudar. El que tiene dinero podría apoyar las iniciativas de aquellos que lo necesitan a cambio de una retribución justa y transparente que dignifique el intercambio y que además sería económicamente superador a lo que hacen los bancos. Así nació Afluenta.

Me ha inspirado, desde el inicio, poder brindar alternativas a las personas para que manejen sus finanzas de maneras más humanas para que puedan elegir que es lo que más les gusta y les conviene. Si tenés alternativas podés elegir y cuando elegís sos libre.

3. ¿Nos puedes facilitar algunas cifras acerca de la escala y el impacto de vuestro proyecto?

En un poco más de 2 años hemos creado y validado un nuevo modelo de negocio basado en la colaboración donde la mayoría de los profesionales de las finanzas pensaba que justamente la colaboración no podía ingresar. No solo porque compite nada menos que con la poderosa banca sino porque pensaban que la individualidad no puede superar a la colaboración. Los indicadores de crecimiento de Afluenta reflejan su alto grado de aceptación: se otorgaron $20.000.000 en créditos a más de 1.000 familias, los cuales fueron financiados por casi 1.000 inversores que realizaron 63.000 inversiones en esos préstamos.

Se recibe una solicitud cada 15 minutos. Inversores y solicitantes de crédito interactúan todos los días de la semana a toda hora del día en todas las provincias de la Argentina. Quienes usaron nuestra plataforma tecnológica ahorraron más de 300.000 horas de su tiempo eligiendo Afluenta para solicitar un crédito, en lugar de hacerlo en un banco. Cada solicitud es en promedio financiada por 92 personas, creció 400% desde el inicio de las operaciones y ha alcanzado un record de 168 inversores por cada solicitud.

4. Recientemente habéis sido listados entre las 10 empresas sociales más importantes de Latino América, ¿cómo puede ser un crédito algo social?

El crédito es más que el préstamo del dinero. El crédito va desde la comprensión de las necesidades financieras de las personas, su asesoramiento, su facilidad para solicitarlo y cancelarlo, su asistencia monetaria y el manejo de las situaciones difíciles que ocurren con el mismo. Manejar estos procesos con transparencia, ética y sustentabilidad se ha convertido en una característica de impacto social en nuestras comunidades que los bancos hace años no brindan y mucho más social cuando los que se involucran para facilitar los recursos son otros individuos que ponen en juego sus ahorros.

5. Te hemos visto también hablar en conferencias como LendIT y la próxima Next Bank LATAM acerca de innovaciones financieras. ¿cómo está reaccionando la banca a todas estas innovaciones? ¿cómo os veen a vosotros?

Hay una frase de Gandhi que ha sido mi inspiración en el proceso de creación de Afluenta desde el inicio y que describe bastante bien lo que le pasa a la banca con el financiamiento colectivo y colaborativo. La frase es: “Primero te ignoran, después se ríen de ti, luego te atacan, entonces ganas.” Los bancos han pensado que esto era una moda pasajera y que ninguna organización pequeña podía hacer ni mejor ni más económico lo que ellos hacían. Ya se han dado cuenta que podemos y han dejado de ignorarnos.

La banca cree que tiene tiempo de adecuar su oferta. Y en verdad no lo tienen. Creen que los cambios no son tan rápidos y que el poder de sus estructuras y las regulaciones le ofrecen un paraguas protector. Nada de eso está sucediendo. Más aún, la economía está pasando de manos a una nueva generación que viene a cambiar todo, “los milenials”, que son mucho más colaborativos que sus mayores.

6. Sóis de origen porteño pero estáis expandiendo operaciones a otros países de Latino América. ¿qué nos puedes adelantar? ¿qué supone para la plataforma a nivel regulatorio e incluso a nivel de sistemas de pago?

El porteño, y el argentino, es su conjunto, explora alternativas porque el medio económico es muy hostil y nuestra economía siempre ha presentado cambios bruscos que obligan a adaptarse permanentemente. En pocos años experimentamos lo que a otras sociedades les lleva décadas. Por eso creemos que lo que hemos vivido con Afluenta en Argentina lo podemos exportar a otras naciones. Buscamos que los latinos podamos unirnos por este mismo sentido de la colaboración que lograron los argentinos en todo el país con Afluenta. Sabemos que son más las cosas que nos unen de las que nos diferencian por ello creamos una organización que tenga alcance pan regional. Los primeros objetivos son: Perú, Chile, México y Colombia. Luego deseamos tener una operación de envergadura en Brasil.

Las regulaciones son similares pero con características distintivas. No obstante ello, Afluenta no realiza intermediación financiera ni captación masiva de fondos del publico sino que hemos desarrollado una plataforma de inversión colectiva para que las personas dispongan de su dinero de la manera en que ellos crean conveniente.

Muchas gracias Alejandro!